El lenguaje plástico se mezcla entre varias disciplinas, la habilidad creativa y el despliegue productivo tiene un porqué en las obras de Lía D’Ottavio. Ella quiere estar presente utilizando al máximo los recursos de la materia. Desde el minuto cero se apropia con entusiasmo el porvenir de técnicas mixtas que nos transmiten juventud, frescura y la dinámica del color.

En esta exposición transmite el propósito que conlleva al artista a expresar mediante sus obras. Es por eso que las paredes portan cantidad de obras, que fueron realizadas durante los años 2019 y 2020, y asimismo en este último año pudo canalizar el encierro con un desenfreno en el proceso productivo. Este no es un dato menor: se da cuando se trata de transformar las malas experiencias, como la que vivimos este año, en buenos hábitos.

El rescate de lo emotivo en la frase que elige para presentarse se traslada en la perpetuidad de sus obras. Discípula del arte académico, maneja claramente el lenguaje de la abstracción y paletas bien definidas. Se permite jugar sin límites cuando experimenta formatos, técnicas y posibilidades que da el color.

Estar presente en Casa España con sus obras representa la mirada multidisciplinaria de un emprendimiento que agrupa arte, tendencias y moda. Con la posibilidad de experimentar en sus paredes la producción del taller de una artista rosarina.